martes, 23 de octubre de 2012

EDGAR EVIDENCIA CUENTO RECORTES


UN JUEGO DE VANIDADES
Un día como hoy desaparece un joven castigado llamado “el niño santo”. Era vasto, inmenso, enorme, oscuro, colosal y salvaje. Solo en el viento volvió preparado para dar regalos insólitos. Se regalo así mismo y estrellas para todos, en un ritual de conservación en favor del mundo para un aviso oportuno especial.
No obstante no todo lo que brilla es oro. Todos tenemos miedo, el suicidio no es la opción, mejor estrena emoción, comparte recuerdos en el universo, la risa cura; se feliz, feliz como una lombriz, llego la hora de salir de la mediocridad.
¿Estás buscando la profundidad de tu futbol? Escápate a la hora de las palomitas, es importante recordar:
“A producto de gallina somos valientes

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